-...y hoy...- esta tarde, los deberes le ocuparon más de dos horas. Cada cinco minutos salía de la habitación a beber agua y, claro, cada dos y medio a mearla. Con los calcetines que estuve aparejando a la tarde jugó a fútbol en su habitación -la pelota está confiscada hasta el fin de semana-, lo llamaron tres veces por teléfono y una de ellas con una vocecita que parecía de alguien secuestrado y que evita que lo oigan me preguntaron:
-Hola...está Mateo, por favor?
-¿Quién le llama? - por fin iba a saber el nombre de su novieta!!
-Soy Loren
-Si no es urgente, por favor, llámale más tarde.Está haciendo deberes.
-De acuerdo
Me quedé como estaba. A estas edades podía ser una Lorena o un Lorenzo. Me surgió una duda que hasta ahora ni me había planteado. ¿Y si la novia de Mateo es uno y no una?.
Me senté en la cocina y el pitido del microondas me sacó del ensimismamiento en el que había quedado.
Esa cena teníamos muchas cosas de que hablar: pendiente-¿en qué oreja piensa ponerlo?,¿instrumento musical ó ballet? ....
7.12.09
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